HACIENDA SÍ
SOMOS TODOS
El pasado día 15
de éste revuelto, políticamente hablando, mes de enero del incipiente año 2016,
se hacía público en diversos medios mi escrito titulado “Hacienda soy yo”. en
el que salía al paso de las manifestaciones de la señora abogada del Estado,
cuyo nombre sigo ignorando, porque más importante que el nombre son los hechos,
presente en la causa del llamado caso “Nóos”, en las que decía que la tan
manida frase de “Hacienda somos todos”, no era más que un eslogan publicitario.
Hoy 15 días
después, las tres jueces, que nadie pretenda tacharme de machista por no decir
juezas, palabro que tal vez ni a ellas mismas les guste, las tres se han
pronunciado en el mismo sentido que yo exponía en mi escrito, basado en que la
doctrina “Botín” no era de aplicación en el caso de la Infanta Doña Cristina.
Es lamentable pero
es una realidad que la Infanta ha causado un grave daño a la Institución
Monárquica, ya no sólo con su presunta actuación o intervención en el caso,
sino, a mayor abundamiento, con su negativa a la renuncia de sus derechos
dinásticos y con su pretendido órdago al Rey de todos los españoles al que le
ha tenido que obligar a despojarla de su ducado de Palma ante su pretensión de
querer seguir manteniéndolo.
Ya hubo un
antecedente en la Corona Real de España, cuando S.M. Don Alfonso XIII, obligó a
su segoviano hijo Don Jaime, Duque de Segovia y de Anjou a renunciar a sus
derechos dinásticos en favor de su hermano el también segoviano Infante Don
Juan, lo que permitió que su nieto Don Juan Carlos I fuera Rey de España, en
lugar de serlo su primo Don Alfonso de Borbón, Duque de Cádiz, primogénito del
Infante Don Jaime, quién por herencia de su padre obtuvo el título de Duque de
Segovia que hoy recae en su primogénito Don Luis Alfonso de Borbón Martínez
Bordiu, hijo de Doña Carmen Martínez
Bordiu, nieta del General Franco, siendo a su vez Don Luis Alfonso Duque de
Anjou y Jefe de la Casa Real al ser el primogénito de los primogénitos.
En aquella ocasión
el Infante Don Jaime accedió a los deseos de su Real padre, a efectos de no
dañar a la Corona, cosa que no ha ocurrido con la Infanta Doña Cristina, que ha
obligado a su Real hermano nuestro Rey Don Felipe VI a despojarla del título,
aunque no la puede privar de sus derechos sucesorios si ella no renuncia como
hizo el Infante Don Jaime que a su vez era el Príncipe de Asturias.
Como segoviano
nacido en La Granja, en cuyo palacio Real nacieron también los dos citados Infantes Don Jaime y Don Juan, así
como la hermana de ambos la Infanta Doña Beatriz, y como súbdito del Rey de
España, lamento sinceramente que un miembro de la Institución Monárquica se
haya podido ver involucrado en la trama del caso Nóos por el hecho de haber podido
admitir en el seno de la familia Real a un plebeyo que no ha sabido estar a la
altura de la Real familia y demostrar con sus actos que era digno de formar
parte de ella.
Por el daño que
estos hechos están causando a la imagen de la Familia Real, me gustaría que la
Infanta pudiera ser declarada inocente de los casos que se le imputan, lo que
ello no me priva de contradecir a la abogado del Estado que se permitió decir
que lo de “Hacienda somos todos”, era poco más o menos una chufla. Hoy han
venido a contradecirla tres jueces que están presentes en el caso Nóos, como yo
lo hice hace 15 días en mi citado escrito.
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