SONETO GROTESCO

        MOCIÓN DE CENSURA I

 Se han juntado un puñado de gañanes

que quieren derrotar al ganador,

entre todos no tienen el valor

y atacan todos juntos cual rufianes.

  Poco deben valer los ganapanes

que quieren derrotarle, si señor,

y el pueblo ya les dice que es peor

que gobierne un hatajo de truhanes.

 Como lobos atacan en manada

y  quieren todos juntos gobernar

para hacerse muy ricos de la nada.

 Y comprarse un chalé en Galapagar

o salir de la cárcel, ¡qué bobada!

que es el sitio en el que tienen que estar.

SONETO GROTESCO

        NUEVO PRESIDENTE II

 No me importa quién sea el Presidente

a pesar de que no lo haya votado,

lo importante es que sea un hombre honrado,

y no le haga el poder un indecente.

 Que sepa separar la mala gente

que va a querer estar junto a su lado,

y le puede clavar en el costado

el puñal traicionero permanente.

 Ya le están acosando sin decoro

algunos sinvergüenzas catalanes

que quieren, sin pudor, hundir a España.

 Mas tiene que estar firme desde el foro

para no consentirles sus desmanes

sacándole buen filo a la guadaña.

SONETO GROTESCO

             CHICO NUEVO

 Tenemos “chico nuevo” en la oficina,

venido de recónditos rincones,

y va a arreglar España con mojones

antes que alguien lo tire a la piscina.

 Apoyado en el quicio de una esquina

ha nombrado ministros a montones

sin currículo alguno en los cajones,

y ha aumentado la cuota femenina.

 Los altos gerifaltes europeos

adivinan lo que hay bajo su ropa

y asumen su presencia a pitorreo.

 Y todos los que mandan en Europa

le han tomado al chiquillo a cachondeo,

y pronto han pronunciado: “jo qué tropa”

SONETO GROTESCO

                EL AVIÓN

  Se ha marchado Pedito en avión

a un concierto en la costa de Levante

usando un avión el muy tunante

que es propiedad del pueblo y su nación.

 Qué poquito ha tardado el muy chupón,

en mostrar su avaricia y su talante

en llevar lo que pueda por delante

de lo poco que queda en el cajón.

 Ha salido la “Vice” en su defensa,

a decir que tenía reunión

para hablar del dinero y la despensa

 con el “presi” del pueblo valenciano

y hablaron de las cosas del cajón

antes que se lo quiten de la mano.

SONETO GROTESCO

   CHICO NUEVO Y SU MUJER

 Ha nombrado Pedo NO-NO a su mujer

Presidente de asuntos africanos

Y la piba se frota bien las manos,

Con el sueldo millonario ¡hay que joder!.

 Ella vuelca en el cargo su saber

Y no sabe que son seres humanos

Que mueren de miseria los hermanos,

Que no tienen ni cosas de comer.

 Le ha caído ese cargo millonario

Aunque es una ignorante pretenciosa

Que de África no sabe ni un denario.

 Y así, como que no quiere la cosa,

Pedo NO-NO, presidente de ocasión,

Gobierna de manera peligrosa.

SONETO GROTESCO

EL CHICO NUEVO Y LOS MUERTOS

 Pues quiere el chico nuevo, el puñetero

Remover en sus tumbas a los muertos,

Pues quiere comprobar que sean ciertos

Los datos de Garzón a Zapatero,

 Y quiere asegurarse el muy artero

Que los huesos de Franco están cubiertos

Y sellados a prueba de conciertos

Por la losa que tapa el agujero.

 Este pobre muchacho vengativo

Que odia el pasado de la Historia

Quedará de su error siempre cautivo,

 Pues su odio pesará como una losa

Y ya verá en su corta trayectoria

Que Franco seguirá siempre en su fosa.

SONETO GROTESCO

             EL REPARTO      

 Ha fichado a Borrell, ¡ojo con él!,

y a su amiga querida la Narbona

que cuando era ministra la mandona

mandaba mucho más que un coronel.

 Los ha traido a todos en tropel, 

para ponerse él mismo la corona,

y que le voten los de Barcelona

por sacar a los presos del cuartel.

 Ha traído en un barco de papel

seiscientos treinta falsos inmigrantes,

y ha empezado el reparto del pastel,

 dotando diez millones a farsantes

que bailen y le toquen el rabel,

y el pueblo más jodido que estaba antes.

A MI HIJA AZUCENA

          MIS FLORES

 He pedido a mi hija Azucenita

que cuide en mi terraza de las flores,

que mustias quedarían con los rigores

del madrileño estío tan cainita.

 Me dice que está ahora muy bonita

que han brotado los claveles mil colores

y las rosas esparcido sus olores

gracias a los cuidados de mi hijita.

 Siempre cuida el jardín en el verano

cuando yo ya me voy de vacaciones

y tiene para ello buena mano.

 Con el riego y amor de su presencia

mi terraza revive con sus flores

supliendo con fervor mi corta ausencia.

(A mi hija Azucena, con amor)