sábado, 11 de abril de 2020

TRISTEZA

TRISTEZA
Una brizna de nieve en la ventana,
una gota de lluvia en el cristal,
un capullo en la rama de un rosal,
un mortecino sol en la mañana.
Una ilusión, una esperanza vana,
una flor que se arruga en un fanal,
un amor que ha llegado a su final
una lágrima que en los ojos mana.
Una tarde que va matando al día
que en brazos de la noche se eterniza
robando de las luces la alegría
Un tamizado cielo, gris ceniza,
que absorbe mi total melancolía
y una vida, amor mío, que agoniza.

jueves, 9 de abril de 2020

GORRIONES EN CELO

GORRIONES EN CELO
En celo están los gorriones,
¿no los oyes, cómo llaman
con sus chillidos gritones
desde lo alto de la rama?.
 Ahora se cambian de sitio
se van buscando a su dama
y se atusan su plumaje
para vestirse de gala.
 Cuando llega la gorriona
ellos luchan en la rama
y se persiguen volando
para llegar hasta el sitio
donde han de poner la cama.
 La gorriona coquetona
se pasea y se engalana
hasta que elije pareja
entre todos los que la aman.
 Después se van muy juntitos,
se dan el pico en la rama
y en un corto vuelo vienen
a anidar en mi terraza.
 Yo los contemplo arrobado
y los observo a distancia,
recordando mi pasado
y mis amores de infancia.
 Que hermoso es ver los gorriones
dándose el pico en la rama,
son como dos corazones
alegres por la mañana.
 Comparten sus ilusiones
antes que llegue la lágrima
en la tarde que oscurece
el cristal de mi ventana.

lunes, 6 de abril de 2020

ME HA SONREÍDO UNA ROSA


                                                              ME HA SONREÍDO UNA ROSA

                                                                                                                                                           UN



Al pasar por el jardín

me ha sonreído una rosa

                                                               quiso decirme una cosa,

mas yo, sordo, no la oí.



Continué mi camino

aquella tarde de abril,

con andar lento y cansino

que me alejaba de allí.



Después, cuando regresaba

a la rosa me acerqué

y noté cómo lloraba

por mi insensato desdén.



Intentando consolarla,

sobre mis pasos volví,

cuando quise acariciarla

ya era tarde para mí.

sábado, 4 de abril de 2020

POEMAS DE MADRUGADA

POEMAS DE MADRUGADA
Por la noche hago poemas
que rompo de madrugada,
pues no quiero que mis penas
sigan al rayar el alba.
Y sueño con las estrellas
y con lunas plateadas
y que a mi lado está ella
mirándose en mi mirada,
reclinando su cabeza
sobre el albor de mi almohada,
soltando su cabellera
color de mieses doradas,
sus ojos color de hierba,
sus labios como la grana,
viviendo la primavera
de una noche apasionada.
Y al llegar la luz primera
no existe a mi lado nada,
pues los versos que escribiera
no pueden resucitarla.
Por eso ahogo mis penas
cuando va a rasgar el alba
destrozando mis poemas,
al llegar la madrugada.

viernes, 3 de abril de 2020

LAS MACETAS ROTAS


      LAS MACETAS ROTAS



 Macetas esparcidas por el suelo

sólo queda de aquel jardín florido

y un alma vieja, hundida en desconsuelo

después de que el amor se haya perdido.



 Cuando la noche al fin, con negro velo

viene a sacar recuerdos del olvido,

levantando los ojos hacia el cielo

cuenta te das de lo banal que ha sido.



 Lentamente, las hojas marchitadas,

de sus tallos se van cayendo a tierra,

igual, las ilusiones más remotas



van siendo por el tiempo desgajadas,

sacadas del crisol, que las entierra

en el jardín de las macetas rotas.

SI VAS AL CEMENTERIO

     SI VAS AL CEMENTERIO
 Verás mi tumba de musgo cubierta,
con lagartijas a su alrededor,
con hierbas secas sin vida ni olor
y la soledad de una cosa muerta.
 Verás la losa raída y desierta,
borrado el nombre, pálido color,
y en la soledad, flotando el dolor
sin luz ni color una cara incierta.
 Verás macetas sin agua ni flores
desparramadas por entre la tierra,
tristes recuerdos para que me llores.
 Oirás las notas de un triste concierto,
verás la tumba que mi cuerpo encierra,
sólo eso verás cuando me haya muerto.

jueves, 2 de abril de 2020

LO WUE DEJASTE, AMOR

          LO QUE DEJASTE, AMOR
 Esto es lo que dejaste de tu esposo:
un cuerpo que al andar se tambalea,
una cara arrugada, vieja y fea
y un rictus de amargura muy penoso.
 Aquel hombre que otrora fuera hermoso
lozano cual la flor de la azalea
hoy verle tu mirada hoy no desea
en ruina convertido y achacoso.
 Ya sé, amor, que ahora ya no puedes verme
y que mi alma se muere de tristeza
al ver que casi no puedo moverme.
 Lamento que tan pronto te hayas ido
mientras yo sigo amando tu belleza
por lo mucho que siempre me has querido.