EL TECHO DEL SEÑOR
RAJOY
Hablando en
términos taurinos, podríamos decir que es fácil torear a toro “pasao”; y viene
a cuento porque nada más conocerse los resultados de las elecciones en
Andalucía con el triunfo del PSOE, que en realidad no ha sido algo como para
que la candidata Susana Díaz pueda sentirse orgullosa, pues no superó los
resultados de las últimas elecciones anteriores; y el batacazo del PP, con la
pérdida de más de 500.000 votos y 17 diputados, los sabios comentaristas y los
periódicos del día siguiente, todos, absolutamente todos presumían de saber que
eso era lo que iba a ocurrir, después de haberse enterado de lo que realmente
ocurrió. A toro “pasao” como decimos es fácil dar un capotazo, es fácil
vaticinar lo que ya ha ocurrido.
Lo difícil está
en, como el tío de las “cabañuelas”, predecir que va a llover antes de ver las
nubes. Cualquiera que haya visto alguno de mis escritos, no sólo de los
últimos, sino desde hace algo más de tiempo, ha podido leer en ellos que lo del
batacazo del Partido Popular, se veía “de venir”; sin ir más lejos los
publicados en mi blog y en el digital Águilas Noticias los días 8 y 9 del actual ya lo predecían,
advirtiendo que el Sr. Rajoy venía cometiendo graves y continuados errores que
podían llevar a su partido a una cuesta abajo sin retorno, al no darse cuenta
que ya ha tocado techo.
El principal error
que ha venido cometiendo desde su nombramiento como Presidente del Gobierno
Español, ha sido el gobernar más para Europa que para España. El Sr. Rajoy ha
venido plegándose a las órdenes y recomendaciones que le venían siendo
impuestas desde Europa, y que sin ninguna duda en nada favorecían a la vida
cotidiana del pueblo español, que en realidad es donde está la cosecha de votos
que le puede mantener en el Gobierno.
Ha estado
dejándose querer por sus socios europeos que le halagaban por cumplir sus
órdenes y se servían de él para sus fines europeístas, mientras los españolitos
de a pie cada vez dejaban más de apoyarle, abrumados por su precaria economía.
El primer aviso ya
lo tuvo en las últimas elecciones europeas, cuando tras mucho vacilar designó a
un candidato que no fue tan votado como en sus cálculos había previsto.
El segundo aviso
lo ha tenido en estas últimas elecciones andaluzas, en las que haciendo de
menos al propio candidato que él mismo designó, no le ha dejado desarrollar su
campaña, supliéndole en los mítines, discursos y manifestaciones, de forma tal
que podemos asegurar que no ha sido el candidato quién las ha perdido, y ni
siquiera el Partido Popular, esas elecciones las ha perdido directamente el Sr.
Rajoy.
El tercer aviso
que, en bien suyo y de España, esperamos que no se produzca, porque al tercer
aviso el morlaco va al corral, y podría darse en las próximas elecciones
autonómicas y municipales, especialmente en Madrid, porque si no se gana
Madrid, ya se puede ganar en cualquier otra región de España que de poco sirve.
Madrid bien vale una misa.
A lo largo de esta
corta democracia han existido varios líderes políticos que se han dado cuenta
de dónde estaba su techo, algunos se han retirado antes de hundir a su partido:
Manuel Fraga fue el primero que con su retirada hizo que el partido resurgiera.
Otros prefirieron seguir hasta que su partido desapareciera o se fundiera en
otro, como el PC; el CDS; la UCD, IU,
UPyD, y hasta en el PSOE han ido tocando techo los Zapatero, Rubalcaba, y otros
que se resisten, Chaves, Grinán, perjudicando a su partido.
Lo cierto es que a
Rajoy no le están ayudando mucho algunos de los mediocres colaboradores que
tiene que le dicen “sí Wana” a todo. Hay ministros a los que apenas se conoce a
nivel del pueblo, habiéndose convertido el partido en un “menage a trois”:
Rajoy, Sáenz de Santamaría y Cospedal y si algún otro destaca, zapatazo.