LA PRENSA LIBRE
Acaba de caer uno de los grandes periodistas
del momento actual Pedro J. Ramírez, director del Diario El Mundo durante los
últimos 25 años. ¿Y por qué?.
Pedro J. ha sido un periodista valiente que
haciendo gala de la libertad de prensa, esa utopía, se ha enfrentado con todos
o al menos con muchos de los graves casos de corrupción política y de otros
muchos más al margen de la política, los muchos casos de indecencia que están llevando a España por
los derroteros de las cloacas.
Esa libertad de opinión, de expresión y de
prensa de las que tanto se alardea en nuestra Constitución, está resultando ser
una engañifla para todos los ingenuos que leemos los periódicos y nos creemos
que es así
Durante muchos años he venido siendo habitual
colaborador de algunos medios de prensa escrita, digital y televisiva, y en
alguna ocasión he recibido una llamada de algún medio para decirme: “oye Paco
esto no lo puedo publicar, o tengo que modificarlo, porque me puede retirar la
publicidad algún medio oficial que me la está dando”. De hecho alguno de esos medios de difusión, tiene más originales míos
sin publicar que los muchos que me ha publicado en otros tiempos. ¿Dónde está
esa libertad?.
Si Pedro J. Ramírez hubiera sido un mal
director no habría durado 25 años al frente de uno de los periódicos de mayor
tirada en España, (amén del Marca, por supuesto)
Hoy tenemos periódicos que se deben al Partido
gobernante, y llenan sus páginas con halagos y zalamerías a sus altos
dirigentes, lo hagan como lo hagan. Por el contrario existen otros diarios que
vienen a ser los detractores de todo lo que haga el Gobierno y que por supuesto
están pagados o subvencionados por los que representan la Oposición. Por otra
parte existen otros diarios que son defensores a ultranza de todo lo que represente
la Monarquía, como palo mayor que es de la nave España; como existen por el
contrario otros periódicos que quieren a toda costa derrocarla, sacando a la
luz pública cualquier hecho que supuestamente haya cometido o podido cometer
alguno de sus miembros.
Al final Pedro J. ha sucumbido por atreverse
con todo, por descubrir o intentar descubrir todo, por publicarlo y por
airearlo.
Parodiando a Don Quijote, con la Iglesia hemos
topado amigo Sancho.
¿Cuántos casos de corrupción
han sido descubiertos por la prensa libre, y cuántos se están quedando ocultos,
por no atreverse a ello?
Hoy la vida social y política a todos los
niveles de los poderes públicos, están quedando en entredicho a nivel del
pueblo: en los autobuses, en los mercados, en las tabernas, en general se
escuchan conversaciones sobre los temas públicos por gentes que sin ningún
recato, censuran lo que dicen las televisiones, las radios y los periódicos, en
las que se puede llegar a la conclusión de que hoy la única honestidad que
existe radica en el pueblo que vota, aguanta y calla.
Yo sé que este escrito habrá alguien que no lo
publique, al considerar que quien lo escribe no es un gran periodista, a pesar
de haber sido publicados más de mil artículos suyos en diversos medios
visuales, hablados y escritos, es el riesgo que corremos aquellos a los que
sólo nos conocen los de casa; pero tal vez llegue a oídos de los que tienen
mando y poder y les dé tiempo a rectificar y dejar de mirarse el ombligo.
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