EL COMITÉ DE
SABIOS
El inefable don Cristóbal Montoro, a la sazón
ministro de la cosa esa que llamamos Hacienda, ha creado un “comité de sabios”,
que en “vox populi” no pasa de ser un comité de listillos, al frente del cual
ha puesto a un tal Lagares, para que entre todos vean la forma de sacar más
dineros a los asfixiados contribuyentes para poder saciar las fauces de ese
gran dinosaurio que es el Estado.
A ninguno de los listillos se le ha ocurrido
pensar que si se suprimen puestos y cargos políticos exageradamente remunerados,
si se suprimen la mitad de diputados en las diecisiete Españas, si se suprime
el Senado inoperante, si se suprimen las Diputaciones provinciales, si se
rebajan los exagerados sueldos que cobran los altos cargos del Estado,
incluidos los del comité de listillos, si se enjuicia y encarcela a todos los
prevaricadores y malversadores que meten la mano en las arcas del Tesoro, bueno
ahí les doy unas cantas ideas de una lista que sería interminable, no tendrían
necesidad de tomar medidas drásticas, aberrantes, impopulares contra el pueblo
que aguanta y calla.
Y entre esas medidas impopulares (quiero decir
contra el pueblo), el comité de listillos ha optado por proponer: “Eliminar la
bonificación por compra de vivienda”; “rebajar el impuesto de sociedades en un
5%”, “subir el IVA”, “Beneficios fiscales a familias numerosas”, “Impuesto de
sucesiones igual en toda España”.
Rebatir una por una esas medidas, nos ocuparía
un libro, pero voy a ser conciso:
La menos impopular y por lo tanto aceptable,
es la de beneficios fiscales a familias numerosas; pero ¿qué conseguirían con
eso?, es el perejil del loro por cuanto hoy día en España con lo de la
planificación familiar, la familia numerosa es un espectro del pasado. Quiénes
hemos sido familias numerosas en el pasado (yo he tenido seis hijos), ya somos
ancianos que no los tenemos a nuestro cargo.
Eliminar la bonificación por vivienda a las
familias jóvenes que tratan de independizarse de sus mayores, es un castigo más
que se les impone, al tiempo que viene a frenar la inversión.
Rebajar el impuesto de sociedades puede
convertirse en un medio más de aumentar el fraude, pues si yo me constituyo en
sociedad con mi esposa, puedo canalizar mis ingresos a través de la sociedad y
cotizar menos que si los pongo a nuestros propios nombres personales. Con
independencia de que la mayor parte de Sociedades mercantiles las forman o
constituyen los más adinerados contra los que el fisco nada puede, ya que las
grandes bolsas de fraude están en las gentes millonarias.
La subida del IVA, es lo más antipopular que
se les ha ocurrido, pues el auténtico pagano de ese impuesto es el último
eslabón de la cadena comercial, el consumidor.
Lo del
Impuesto de donaciones y sucesiones igual en toda España. En la Comunidad de
Madrid se da la circunstancia de que por su buena administración y
planificación de su presupuesto, hace años que se suprimió este impuesto, cosa
que por otra parte pudo y puede realizar desde el punto de vista legal por la
transmisión de facultades a las Comunidades y Ayuntamiento en materia fiscal.
El querer ahora quitar esas facultades a las Autonomías es un retroceso a los
años del ordeno y mando.
Conozco pueblos cuyos Ayuntamientos no cobran
ni un solo impuesto a sus vecinos porque tienen otras fuentes de ingresos por
sus propiedades, sus operaciones comerciales junto con la honradez y buena
administración de sus ediles, y obtienen un superávit en sus presupuestos que
les permiten dotar a sus pueblos de todos aquellos servicios y necesidades en
beneficio de sus vecinos, sin cobrarles ningún impuesto.
Que se aprendan la lección los listillos que
tantos estudios y títulos en economía tienen, ya que existen infinidad de
personas con empresas poderosas y rentables que no han leído ni un solo libro
de economía. “Al toro, que es una mona”.
MONTORO
Y LOS SABIOS
Al toro, Montoro, que es una mona,
es
este un dicho del argot taurino
se
dice al torero que no está fino
con
una muleta muy remolona.
El toro de hacienda se desmorona
con
esos listillos de poco tino,
que
meten la pata en su desatino
y
hacen la reforma que desentona.
Con esas medidas tan arbitrarias
darás
con tus huesos en la cuneta,
ya
que no son sabias ni necesarias.
Y a no ser que tengas buena muleta
cambia
de tercio, enciende luminarias,
y
no hagáis al pueblo más la puñeta.
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